15 de junio de 2010. Martes
No es mi guerra ésa; la de participar en una absurda escalada de descalificaciones. La de enfrentar a los vecinos. La de decir y no hacer; y hacer sin explicar. La de chismorrear y difundir rumores que tanto dañan a las personas.
Me dedico a trabajar, a explicar, a aportar, a escuchar, a informar y a rendir cuentas de lo que opino, y de lo que hago.
La gente de Rocafort está harta de engaños, de provocaciones inútiles, de enfrentamientos interesados, y de que sus derechos sean considerados favores concedidos discrecionalmente. La gente está harta de eso, y yo también.
Mi guerra es la guerra de la gente normal; la de las personas que salen de su casa y encuentran las calles sucias, y las plazas inservibles. La de las personas que se preguntan cómo puede ser que a la entrada del pueblo (por Campolivar), se esté construyendo ¡una zona verde enmedio de dos viales, que nadie podrá disfrutar! Y la de quienes contemplan con asombro que las nuevas aceras construidas en la zona del PAI de «el Bovalar» no garantizan el paso de dos personas juntas; o de aquellas otras que, cuando empiecen a demoler en la plaza de España «El Alevín», de un momento a otro, se teman lo peor.
Ésa sí es mi guerra y la de la gente que no tiene plaza escolar para sus hijos aquí en su pueblo; la de quienes pasan junto al Centro de Día y suspiran porque después de más de tres años acabado, siguen sin poder utilizar sus instalaciones que tanto necesitan; la de las personas que aspiran a invertir parte de su tiempo en formarse, en conocer sus derechos, en ampliar sus conocimientos, en apostar por sus iniciativas, y a la que se les niega la oportunidad de seguir creciendo.
Mi guerra es la de ellas, y la de ellos; la de la gente corriente que paga religiosamente sus impuestos y recibe a cambio más problemas de tráfico, menos plazas de aparcamiento, y ninguna solución que facilite los itinerarios comunes. La de las personas que reclaman que el Rocabús sea un servicio eficaz en beneficio de todos; la de quienes desearían que el comercio de proximidad fuera tratado con mimo para fortalecerlo y convertirlo en una excelencia de nuestro pueblo; la de quienes han visto multiplicado el número de viviendas y disminuidos sensiblemente todos los servicios.
La mía es la guerra de las personas que rechazan que con el dinero de todos se costee una web que difunde mensajes propagandísticos y groseros hacia las personas; unas publicaciones municipales delirantes por incultas e insolentes. La mía es la guerra de quienes se echan las manos a la cabeza porque con el dinero de todos se sostienen salarios innecesarios; se sufragan gratificaciones y productividades personales inauditas que dividen y enfrentan a toda la plantilla de empleados municipales; se abonan facturas telefónicas astronómicas; se pagan indemnizaciones laborales por negligencia de las autoridades municipales; se pagan recargos a la Seguridad Social; se pagan multas a la inspección de Trabajo; se pagan abogados que impidan que los cinco concejales socialistas hagamos nuestra labor; se paga una sanción judicial por acoso laboral a una empleada municipal; se pagan asesoramientos jurídicos para evadir compromisos adquiridos con los vecinos…
Mi guerra es la de la gente que quiere divertirse, agruparse, conocerse y participar en actos imaginativos para descubrir cuánto somos capaces de crear y hasta dónde podemos llegar. Es la de la gente joven que busca sin encontrar espacios propios, ofertas generosas que den cauce a sus necesidades, a sus deseos y a sus derechos.
Mi guerra es la de quienes no entienden por qué son señalados con desprecio si manifiestan una opinión diferente; la de quienes se avergüenzan del despilfarro económico con el que estamos sustentando unos servicios municipales ineficaces. La de quienes miran lo que sucede en la Casa de Cultura y sienten un escalofrío. La de la personas que con voluntad férrea siguen adelante con su trabajo colectivo y hacen posible que la Banda de Música siga creciendo más y mejor; que el Coro Municipal suene a gloria bendita; que el Grup Esportiu multiplique sus actividades …
Mi guerra es la que está librando la gente corriente en las calles de mi pueblo, en las tiendas, en los coles, en los bares, en las esquinas, en las asociaciones, en las charlas con los amigos, … en los ambientes públicos, y en los privados.
Mi guerra está con ellos, con las personas. Cualquier otra, no merece ni un minuto de nuestro tiempo.
15 junio 2010 at 22:29
Ni la nuestra.
En realidad, la guerra no es la mejor expresión, aunque entendemos lo que quiere decir. Porque eso es lo que ellos quisieran instituir y lo consiguen bastante bien: la guerra al ciudadano.
Lo tuyo es obligación, deber, postura, compromiso, Amparo. Y en eso, somos muchos los que estamos contigo. Y seguiremos delegando en ti.
15 junio 2010 at 22:34
Entro en la web del ayuntamiento, por alusiones. Solo merece un calificativo: miserable.
Miserable por la intención, la falta de análisis y la forma grosera de expresarse. Este hombre no tiene clase ni para insultar.
La obra, bien o mal hecha en su momento -no entro en la cuestión- tiene remedio. Lo que no tiene remedio es la falta de inteligencia y de categoría.
La perspectiva, tienes toda la razón, no está en lo que tenemos, sino en lo que queremos. Así que, ¡adelante!
16 junio 2010 at 09:25
pienso que se ha caido porque con el paso del tiempo toda obra se deteriora, o no se ha caido el techo de la escoleta hace poco tiempo ?
no pierdas el tiempo entrando a debatir amparo
alcalde eres un cobarde que te escondes detrás de la casa de la cultura,
no mereces calificativo,
eres […],
quién te ha visto y quién te vé Tano
estabas mejor vendiendo pollos o tornillos
no sigas, no te cree nadie
dejalo ya y vete
hay otras personas que seguro lo harán mejor que tú
y cacique no solo es la marca de un coñak
estas acabado
prepara tu discurso de despedida
te va a hacer falta
que esa sonrisa falsa no engañe a nadie más, embustero
16 junio 2010 at 14:27
Respuesta a no entres en debate:
No entraré en ese debate, créeme.
He tenido que suprimir una parte de tu comentario, porque la rabia o el desaliento, no son buenos consejeros.
En cuanto a los oficios que el alcalde ha desempeñado en su vida privada, con anterioridad a cobrar su dedicación exclusiva en el ayuntamiento, me parecen tan dignos y tan respetuosos como cualesquiera otros. Imagino que tu intención al mencionarlos no es valorar negativamente ninguno de esos trabajos.
En cualquier caso, te ruego que en próximos comentarios evites afirmaciones que puedan ser malinterpretadas por los lectores.
Gracias por venir.
16 junio 2010 at 22:59
Eixa no és la teua guerra, Amparo…
Però el treball que queda per fer és ardu perquè hi ha enfront un alcalde contumaç amb l’autoritarisme, favoritismes, malbarataments, desídia i incultura, etc… A qui li molesten les crítiques i troba que són impertinències demanar explicacions i els comptes clars. Per això es desfoga en la premsa amb articles viscosos, entrevistes consensuades i repetitives i sobretot amb textos mal redactats i amb faltes d’ortografia, pamfletaris, oportunistes i ridículs en la « seua » web municipal que paguem tots. Fotos i més fotos seues de vegades irritants, quan no còmiques -Corpus, Llar dels Jubilats i Dinar de la Setmana «Cultural» de la 3ª edat-. Un desficaci total.
En fi, aquest és el seu estil de cacic populista, paternalista, demagògic i insolent. I en la seua prepotència s’atreveix a dir en un Ple: «hago lo que me da la gana, porque la Constitución me ampara». L’empara la Constitució i bé que en trau profit. Mai no ho haguera pogut somniar! Un abús manifest i una pèrdua de temps per al poble molt difícil de recuperar.
17 junio 2010 at 00:26
El señor alcalde sigue haciendo un uso indevido de la «cutreweb» del ayuntamiento.
Ey, Señor alcalde!, cree su propio blog para contestar a Sampedro con su peculiar literatura y deje de utilizarla como si fuese un muro donde pega fotos y hace rayajos. Está ensuciando la imagen de Rocafort desde la web municipal.
Que gracia tiene para estropear lo que toca.
17 junio 2010 at 18:32
Resposta a enric albiach alfonso:
Cal seguir treballant de valent, tens raó; amb la mateixa convicció i el mateix rigor que ho hem estat fent des del primer dia que arribarem a l’ajuntament.
El que tenim enfront no és només un alcalde com el que descrius -que ho és!-, és també tot un equip de govern responsable del que està passant.
Gràcies.
17 junio 2010 at 23:14
Justificació:
Per a no fer-ho llarg i per a ser més concís i contundent m’he limitat a descriure al Sr alcalde, com ho he fet ja altres vegades i en altres llocs. I també ho he fet de la resta de contumaços regidors que formen un
equip de govern insòlit. Des de juliol que porte assistint amb regularitat als plens, observant i escoltant, i després de llegir tota la seua literatura, les notícies que generen, les activitats que proposen i els resultats de les seues decisions no em queda cap dubte que formen una massa compacta generadora de desgavells, confusió i enfrontaments.