4 de julio de 2010. Domingo

Pués eso, del pleno del viernes, lo que nos temíamos: no han tenido más remedio que «aceptar» -a regañadientes- un recorte de sus  sueldos un 5%, pero ni hablar de congelación en el 2011, y ni hablar de hacerlo efectivo ya en la nómina de junio (como ha sucedido con todos los empleados y cargos públicos).

Nuestro gobierno local se aferra al hecho de que en julio del año pasado ya se rebajaron sus nóminas en un 10%; y tienen razón, lo hicieron. Pero ésa no es la cuenta, porque olvidan estos datos fundamentales:

– En junio de 2007, el alcalde se aumentó su sueldo un 20%; y los concejales de gobierno, un 66%

– En enero de 2008, todos ellos se aplicaron una subida del 4%

– En enero de 2009, todos ellos ajustaron sus salarios con el aumento del IPC

En cualquier caso, ahora, al alcalde, con un salario anual de 45.000€ (más alto que el que percibe el de Godella, municipio de más de 13.000 habitantes; y casi el mismo que el de Paterna, municipio de 70.000 habitantes), le hubiera correspondido un recorte del 7%, porque la medida que se ha adoptado en la función pública, -y a la que se han sumado los cargos electos- es progresiva; es decir, tanto ganas, tanto es el descuento que se aplica.

Ya no le daré más vueltas a todo esto; ¿para qué? … ¡Ha tenido que hacer falta que les obligáramos a convocar un pleno, para que tomaran alguna decisión! (pleno al que, por cierto, no asistió el alcalde, ni el concejal de Acord; el primero, porque -en boca de Almela, presidente en funciones del pleno- «estaba en otro lugar»; y el segundo, por motivos laborales)

Ya sé que hubiera sido más elegante que ellos mismos se hubieran apresurado a hacerlo, dando ejemplo; y sin esperar a ser forzados. Pero no es el caso.

Feliz semana.

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