Lunes 30 de mayo de 2011
No me cansaré de repetirlo ni de disfrutarlo, la gente de mi pueblo está feliz, esperanzada y viva como hacía años que nadie recordaba.
He recibido centenares de felicitaciones de dentro y de fuera de Rocafort, e incluso algunos medios de comunicación se han hecho eco de que sucedió aquí el pasado 22 de mayo como si se tratara de un hecho extraordinario.
A todos les respondo con la misma alegría que lo extraordinario de verdad aún está por llegar, porque vamos a ser capaces de construir juntos, a partir del próximo 11 de junio, una sociedad más unida y más comprensiva. Sin rencores, sin alarmas y sin prejuicios.
Vamos a demostrar que Rocafort tiene vida, talento a raudales, imaginación y muchas muchas ganas de salir adelante con honestidad, con eficacia, y con diálogo.
Nos lo merecemos todos y lo vamos a lograr.
Desde aquí mi profundo agradecimiento a todas las personas que han hecho posible que Rocafort vuelva a creer en sí mismo.
30 mayo 2011 at 22:59
Uno mi felicitación y alegría a la de tanta gente. Un abrazo muy fuerte y adelante. Aun en la distancia muchos nunca perdimos la esperanza de que esto, ocurriese por fin.
31 mayo 2011 at 22:01
Con gran alegría por el objetivo perseguido tenazmente y en justicia conseguido, pues no en vano habéis hecho y en particular tu como portavoz, la mejor oposición que yo tenga conocimiento en mi larga vida participativa, un abrazo solidario de la agrupación socialista de Orcera y en particular el mío propio, con el merecido cariño ganado a pulso con vuestra lucha política del día a día durante estos cuatro últimos años.
Nosotros también y a pesar del tsunami nacional, hemos recuperado la alcaldía de Orcera.
http://psoedeorcera.blogspot.com/
http://sergiorodriguez.psoe2011.es/
Saludos solidarios.
Jesús Martínez.
1 junio 2011 at 15:26
Un abrazo muy cariñoso, Jesús.
Te conocí a través de este blog, y tuviste la gran generosidad de venir a Rocafort para que pudiéramos abrazarnos.
Vamos a conseguirlo entre todos, porque aquí y en Orcera nuestra felicidad es la felicidad de la gente de nuestros pueblos.
Algún día, te lo prometo, viajaré hasta allí para seguir celebrándolo.