14 de febrero de 2009, sábado
El diario EL PAÍS, en su edición digital de hoy, y en la impresa, me finiquita el desayuno en un plis-plás.
La empresa constructora de El PAI de «el Bovalar», BEGAR, es una de las que están siendo investigadas en la trama de corrupción que sacude al PP.
Los periodistas que firman la noticia aseguran que la promotora del PAI, la empresa URBANITE SL, negó que en estos momentos tuviera ninguna obra en marcha en Rocafort. ¿Por qué lo hizo? No lo entiendo, de verdad.
Descubrir que eso no es cierto es tan sencillo como contemplar los carteles que anuncian la promoción en la entrada de Rocafort, por el desvío de la carretera de Bétera.
Rocafort vuelve a salir a la palestra con noticias desalentadoras para todos los vecinos.
Roguemos.
14 febrero 2009 at 20:40
Mare de Deu!!!!!!
No pensaba yo que Garzón llegara hasta Rocafort, aunque no es para menos.
Como empieze a estirar de la manta..
A más de uno no le debe tocar la camisa al cuello.
15 febrero 2009 at 03:03
Tan sencillo también como consultar el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana del 20 de febrero de 2.007:
Ayuntamiento de Rocafort
Información pública del proyecto de reparcelación y proyecto de
cuotas de urbanización del sector residencial El Bovalar de Rocafort.
Presentado el proyecto de reparcelación correspondiente al programa
de actuación integrada promovido por la mercantil Urbanite, SL,
para el desarrollo del sector El Bovalar de suelo urbanizable residencial
del Plan General de Ordenación Urbana de Rocafort…
15 febrero 2009 at 10:20
NO SÉ SI HAY RELACIÓN ENTRE «EL BOVALAR» Y LAS INVESTIGACIONES DE GARZÓN.
SÍ CREO QUE, EN «EL BOVALAR», HAY ALGUNOS INGREDIENTES QUE JUSTIFICARÍAN UNA INVESTIGACIÓN.
Veamos:
INFORMACIÓN PRIVILEGIADA:
– Cuando se tramitó, muy pocos conocían el nuevo límite del término de Rocafort.
– En los documentos municipales, se reconocían contactos: “a juicio del técnico informante, el anteproyecto presentado por la empresa Urbanite, S.L., es la que mejor se adecua a las determinaciones y directrices marcadas por la Corporación Municipal.”
DEJACIÓN MUNICIPAL O, SIMPLEMENTE, INCUMPLIMIENTOS LEGALES.
– Desde 1996, el Ayuntamiento debió revisar el Plan General para asegurar un correcto desarrollo urbanístico de Rocafort y, con ello, igualdad de oportunidades para su gestión.
– Se ha ocultado, entre otros, el escrito de la Conselleria de Cultura, Educación y Deportes indicando la necesidad de reservar una parcela mínima de 12.000 m² para educación secundaria. (El interés particular antes que el interés general)
– Cesión al urbanizador de parte del aprovechamiento urbanístico que le corresponde al Ayuntamiento, en pago de las obras de urbanización. ¿Por qué no se han pagado las obras con el dinero cobrado de «La Bonaigua»?
– Aplicación de criterios de valoración de los derechos municipales manifiestamente mejorables.
ELECCIÓN ESTRATÉGICA DE LAS FECHAS CON EFECTOS CONTRARIOS AL DERECHO DE INFORMACIÓN DE LOS CIUDADANOS.
– La información pública de la modificación del Plan General solo duró 20 DÍAS, FRENTE AL MES preceptivo.
– Se inició el 3 de abril de 2003 -cuando ya estaban convocadas las elecciones municipales- y se adjudicó provisionalmente en el primer pleno (25-jul-03) después de tomar posesión los nuevos concejales (14-jun-03) (¡Qué pocos días de estudio necesitaste, Carlota! ¡Qué pocas oportunidades diste a los concejales de la oposición!)
– La Declaración de Impacto Ambiental del PAI, se produjo el 10-oct-05; sin embargo, no se hizo pública hasta un año después (3-oct-06). Mientras tanto, se aprobó definitivamente todo (el Plan Parcial y la adjudicación del PAI), sin conocer los condicionantes medio ambientales.
Mientras tanto, sin PAI aprobado, otras administraciones y organismos ya iban preparando el terreno: desvíos de Barrancos, mejoras de carreteras, ampliaciones de redes…
Quienes hemos tenido la oportunidad de ver -a corta distancia y pese a la ocultación practicada- actuaciones como las de «El Bovalar» nada nos sorprende que un juez decida investigar las relaciones entre ciertos negocios y ciertos responsables políticos.
A mayor transparencia, menos trabajo para la Justicia.
15 febrero 2009 at 18:16
Vaya con lo que nos tenía reservado el Juez Garzón
si un periódico de tirada a nivel nacional informa de los posibles trapicheos del Bovalar con la empresa BERGAR- Urbanite y el Alcalde Bosch, no andará muy lejos la cosa, porque cuando el río suena agua lleva.
a ver si es capaz de dar ahora la cara y parar a un Juez, porque lo tiene un poco crudo el falangista, lo que tiene que hacer es dar una explicación de sus mangonerías en suelo no urbanizable y dimitir
15 febrero 2009 at 22:31
esta mañana he sacado una foto de un cartel amarillo de BEGAR en la zona frente al Punto y coma, más que todo por si desaparece el cartel y la constructora al mismo tiempo.
15 febrero 2009 at 22:39
Los intereses del empresario castellanoleonés José Luis Ulibarri en territorio valenciano están relacionados con la comunicación y el urbanismo. Bajo este último epígrafe, además de su participación en el PAI Xilxes Golf Resort, la sociedad BEGAR -del grupo de Ulibarri- construye el plan residencial El Bovalar en Rocafort. El proyecto afecta a cerca de 150.000 metros cuadrados de suelo no urbanizable y prevé 550 viviendas en un municipio de 6.000 habitantes.
La empresa URBANITE SL -en cuyo accionariado están los Serratosa Caturla- presentó el proyecto al consistorio presidido por el popular Sebastián Bosch en mayo de 2003, poco antes de las elecciones.
El coste se estimó en un principio en 7,7 millones de euros, que tras las modificaciones se elevó a en 9,1 millones.
La nueva corporación, con Bosch de nuevo al frente, lo aprobó provisionalmente dos meses más tarde y lo adjudicó a Urbanite, y el 6 de marzo de 2006 pasó el filtro de la Comisión Territorial de Urbanismo, con Rafael Blasco todavía de consejero. Su tramitación fue controvertida hasta el punto de que el grupo municipal socialista recurrió en dos ocasiones (junio y julio de 2006) el PAI ante la alcaldía y ante la consejería que dirigía entonces Esteban González Pons. No prosperaron. Sí consiguió pararlo parcialmente el Ayuntamiento de Godella por la canalización de un barranco. Un portavoz de Urbanite dijo ayer a este diario que no tiene nada en Rocafort, pese a que un gigantesco cartel a la entrada de la localidad informa de que esta sociedad es el urbanizador.
TIC-TAC-TIC-TAC el reloj empieza la cuenta atrás Sebastian Bosch
15 febrero 2009 at 23:26
Hola amparo, ¿ tiene esto algo que ver con Rocafort, estoy asustada ?
Sale hoy domingo 15 Feb-09 en el periodico levante
Por otra parte, un ejemplo más claro de los intereses urbanísticos de la trama lo muestra una conversación grabada a Francisco Correa con Álvaro Pérez, según publicó El País, en la que dijo: «Tengo un tema gordo en Valencia, con un PAI prácticamente cerrado, el tío pide 1.000 kilos de más. Compramos a 10.000 y vendemos a 20.000. Ganamos 12.000 kilos. Un empresario pone el 50% y yo el otro 50%. De mi 50% yo reparto con Ramón Blanco, con Álvaro (Pérez), con Pablo y con el alcalde … Hay un tema medioambiental que lo desbloqueo yo».
16 febrero 2009 at 21:44
Se vé que con lo que le va a caer encima, este pobre hombre necesita evadirse.
Ha delegado su cargo en Javier almela y se ido a pensar.
Donde está el alcalde matarile rile rile.
16 febrero 2009 at 23:55
Hola «es el PAI de Rocafort»
¿Sabes qué me preocupa realmente?:
– La situación en la que quedarán los propietarios si todo esto se confirma.
– El desastre que se nos puede avecinar: 160.000 metros cuadrados de Rocafort empantanados
– Una situación económica municipal más grave de lo que ya es
¿Sabes qué me provoca todo esto?:
– Vergüenza cuando leo los periódicos y veo a mi pueblo en ojo de un huracán maloliente
¿Sabes qué creo?:
– Que no hay que asustarse, que el tiempo y los hechos ponen a cada uno en su lugar.
Gracias por participar.
17 febrero 2009 at 00:00
Hola «ayuntamiento»,
La verdad es que nuestro alcalde no deja de sorprenderme. Hoy mismo ha firmado un decreto en el que delega sus funciones en Javiel Almela hasta el próximo 26 de febrero.
Cuando lo he sabido -esta mañana- he recordado lo que sucedió el pasado mes de abril: cuando el Juez paralizó cautelarmente las obras del PAI, el alcalde delegó sus funciones en Javier Almela (días más tarde, el 9 de mayo, presentó una baja médica).
Seguro que todo es fruto de la casualidad -y lo digo sinceramente-, pero la causalidad no actúa en vano. A veces.